Viñas viejas de más de 50 años, situadas a 900 metros de altitud, nos ofrecen un vino afrutado, fresco y fácil de beber, con el sello de calidad de Jorge Ordoñez.
Lo etiquetamos como un “vin de soif”, por aquello que “vino de sed” suena menos chic.
Se trata de un vino sencillo y directo, para tomar en copa, vaso, chato, gorrión o coguto. Soporta sensacionalmente el paso por frío, por ello mismo, no lo descarten como vino de puerta de frigorífico, nevera de playa o cubitera en la piscina.
Borsao Crianza un blend de Garnacha, Merlot, Tempranillo, procedente de viñedos de monte de 20 a 40 años de edad situados a 500-700 metros de altitud, con suelos arcillo-calizos, pedregosos y limosos. La fermentación es independiente para cada varietal, pasando posteriormente una estancia de 10 meses en barricas de roble francés (90%) y americano (10%).
Color cereza con borde granate vivo. Fruta roja y negra sazonada con notasespeciadas (pimienta blanca) y frescos balsámicos dentro de un conjunto en el que la fruta lleva la voz cantante. Cuerpo medio como cabe esperar de un crianza, pero con una firmeza especial en esta añada que permitirá un poco más de desarrollo en el tiempo. Un tino muy entero, con un leve toque de tiza en final de boca que permite que el terruño se imponga sobre la categoría de envejecimiento.
Un vino que seleccionamos para el Club de Vinos, por su marcado carácter varietal: violetas, guindas en licor y aromas de monte (romero, tomillo). La boca es una réplica en matices a los detectados en nariz, a la vez que fresca y golosa.
Un gran vino navarro, que reivindica el papel de la Garnacha en la elaboración de tintos...
Corriente es un vino sencillo y amable que representa a una región, su cultura y seguramente su vino.
La finura que caracteriza las elaboraciones de Telmo está muy presente en este vino, cuya nariz es un tándem de fruta fresca y delicados tostados, propios de una madera vieja, pero limpia. Deja un paso por boca sutil, balanceado y placentero; Gana enteros a medida que se airea, por lo que trasvasarlo (nada de decantarlo) a un jarrillo, será una fantástica solución para disfrutarlo en plenitud
Un Toro dócil y civilizado, pensado para el consumo y aceptación del público general, que nace de las viñas más jóvenes que dispone la bodega.
Un vino fino (nos puede evocar a un buen Ribera), en el que predomina las notas frutales y florales (cerezas y violetas) con un agradable fondo cremoso. Posee una rica y equilibrada boca.
Un vino para la tertulia, el tapeo informal o una relajada tarde de lectura.
Atteca es una creación de Sarah Morris, prestigiosa enóloga australiana que asesora del Grupo Juan Gil, la cual ha sabido inculcarles a estas Garnachas los preceptos del gusto del "Nuevo Mundo" (un fruitboom bien sustentado por la cremosidad de un roble de calidad).
Un vino tremendamente versátil, capaz de poner de acuerdo a los paladares más iniciados e iniciáticos.